Negentropico

Politizarse hoy no pasa únicamente por no participar de la fiesta de la democracia, ni tan sólo se reduce a ser antidemócrata, significa ante todo desprenderse del etiquetado de cualquier opción sistémica. 

Politizarse hoy es vivir en la bipolaridad de vivir una realidad espectacularizada y neoliberizada a un tiempo que se interrumpe en ella agujereándola de forma esporádica, asistemática, desde el sinsentido que nos muestra sus vísceras. 

Politizarse hoy es ser anónimo, prescindir de la máscara para asistir al baile de disfraces. 

Politizarse hoy es anestesiarse contra el simulacro en el que se ha convertido la vida para poder vivir en sus agujeros. 

Politizarse hoy es un ejercicio intenso de filología para destapar el verdadero sentido del discurso que se nos impone dónde, por ejemplo, libertad, tolerancia, democracia o estado de derecho significan opresión, marginación, esclavitud, o estado-guerra. 

Politizarse hoy es no comprar un futuro mejor, no aceptar un hoy acomodaticio, es no mitificar el progreso que nos ha sacado de tiempos pasados nefastos.